jueves, 11 de junio de 2009


Es agosto, una pequeña ciudad de la costa, en plena temporada;
cae una lluvia torrencial hace varios días, la ciudad parece desierta.

Todos tienen deudas y viven a base de créditos.

Por fortuna, llega un ruso forrado y entra en un pequeño hotel
con encanto.

Pide una habitación.

Pone un billete de $100 Euros en la mesa del recepcionista y se va a ver las habitaciones.
El jefe del hotel agarra el billete y sale corriendo a pagar sus deudas con el carnicero.
Este coge el billete y corre a pagar su deuda con el criador de cerdos.
A su turno éste se da prisa a pagar lo que le debe al proveedor de alimento para animales.
El del alimento coge el billete al vuelo y corre a liquidar su deuda con la prostituta a la que hace tiempo que no paga.
En tiempos de crisis, hasta ella ofrece servicios a crédito.
La prostituta coge el billete y sale para el pequeño hotel donde había traído a sus clientes las últimas veces y que todavía no había pagado.
En este momento baja el ruso, que acaba de echar un vistazo a las habitaciones, dice que no le convence ninguna,
coge el billete y se va de la ciudad.
Nadie ha ganado un duro, pero ahora toda la ciudad vive sin deudas y mira el futuro con confianza

MORALEJA: SI EL DINERO CIRCULA SE ACABA LA CRISIS!

1 comentario:

Hox dijo...

Y como se llama tu cuento??